Privacidad e inmediatez, dos de los atributos más valorados del dinero en efectivo

Cada vez son más las voces que se alzan para defender los beneficios del efectivo para la sociedad. Esta vez ha sido en un evento celebrado por la Asociación del Marketing Bancario Argentino, donde se ha asegurado que el dinero en metálico “constituye una reserva de valor y seguridad que mantiene sus características de medio transaccional, universalidad, inclusión, resiliencia, privacidad e inmediatez”. 

Además, a pesar del auge de los nuevos métodos de pago, se ha dejado patente que el efectivo en circulación sigue creciendo en el mundo. Concretamente, “el 75% de las monedas creció a más de dos dígitos por valor de billetes en circulación en 2020”. Para ello, se han puesto ejemplos como el del dólar estadounidense, que incrementó su circulación un 10% y su participación en el comercio minorista de EE.UU. llegó al 30%. “Allí donde el e-commerce exhibe una madurez considerable, se impulsa una mayor aceptación del efectivo en los comercios, lo que fomenta la inclusión”, han añadido sus defensores. 

Pero no es el único ejemplo que se ha puesto al respecto. El euro mostró un comportamiento similar, ya que su circulación creció un 9% en 2020. Países como Alemania, donde el efectivo sigue representando el 60% de las transacciones, o España, Grecia, Italia y Portugal, cuya participación alcanza el 80%, son claros exponentes de la buena salud que sigue teniendo el dinero en metálico entre los ciudadanos. 

Una buena salud que también se demuestra en Argentina, donde existe un importante porcentaje de personas que no cuentan con acceso a servicios bancarios y para el que el efectivo sigue siendo el medio de pago más empleado. Concretamente, los billetes y monedas fueron el medio transaccional de 87% del total de las transacciones. 

Por eso, en este congreso se ha apuntado que, “gracias a la tecnología, el efectivo mantiene su vigencia como medio transaccional y universal, inclusivo, resiliente, privado y directo”.