El Banco de España advierte: existen 1,3 millones de personas vulnerables por no tener acceso al efectivo

El cierre de sucursales en las zonas rurales y menos pobladas del país ha provocado una situación de vulnerabilidad en 1,3 millones de personas, según datos del último informe del Banco de España (BE), titulado “Infraestructura del efectivo y vulnerabilidad en el acceso al efectivo en España”.

De hecho, en este texto se indica que las soluciones alternativas que han surgido para suplir a estos canales tradicionales de obtención de efectivo no son suficientes para cubrir este servicio, ya que hay ciudadanos que tienen dificultades para acceder a algunos servicios financieros y que, en muchas ocasiones, cuentan con pocos conocimientos digitales para realizar sus compras de otra forma.

Por eso, el BE es claro al afirmar con rotundidad que “es fundamental asegurar que los ciudadanos que deseen usar este medio de pago tengan acceso a él”. Algo que ahora no ocurre con la totalidad de la población. De hecho, las personas más afectadas por esta situación rondan aproximadamente el 3% del total. Según el informe, “alrededor de 340.000 personas viven en municipios con una vulnerabilidad alta (un 0,7% de la población española), con acceso al efectivo a una distancia media de 9,4 kilómetros. Se trata de poblaciones en las que los mayores de 60 años superan el 40% del total y la renta disponible está por debajo de la media nacional”.

Estos municipios tienen una población media de 400 habitantes y están situados, sobre todo, en las provincias de León, Salamanca, Ávila y Zamora, por lo que Castilla y León se coloca como la comunidad con menor cobertura de todo el territorio nacional. De hecho, en 2008 más del 70% de los municipios de esta región no contaban con una oficina bancaria (el 13% de sus habitantes totales). También Cáceres y Soria tienen una vulnerabilidad alta al contar con poblaciones que dependen de una sola oficina. Si esta desapareciera alejaría el acceso al efectivo hasta los 13,5 kilómetros.

Por su parte, la población con vulnerabilidad media asciende al millón de habitantes, que viven en zonas de Galicia (el 24% del total en este rango). Las causas de esta situación no son otras que la citada reducción de las oficinas y cajeros automáticos, que ha sido muy desigual en todo el territorio nacional. Por eso, la entidad cita en su informe la necesidad de impulsar soluciones alternativas a los canales tradicionales que garanticen el acceso al efectivo al conjunto de la población.