SOS: nuestra cultura de propinas peligra por la digitalización

Es innegable que la proliferación de nuevos métodos de pago complementa al efectivo, ya que permite a los ciudadanos contar con un mayor abanico de posibilidades, lo que mejora significativamente su experiencia de cliente. Pero también es verdad que esta diversificación está poniendo en peligro, por ejemplo, el complemento salarial de empleos como el de taxista, camarero o portero, por nombrar algunos, para los que las propinas suponen un importante complemento de sus ingresos.

Porque cuando se paga en efectivo normalmente se deja el cambio al taxista o al camarero, pero con el pago digital nos bajamos del vehículo sin haber intercambiado dinero físico y esperando que la factura llegue a nuestro correo electrónico. Así lo determina un estudio realizado por The New York Times, que ha investigado este problema y ha descubierto que los empleos que dependen en gran medida de las propinas han experimentado una merma de sus ingresos, en algunos casos hasta del 60%, lo que demuestra que este hábito está en declive.

Por eso, algunos negocios han implantado opciones de propina electrónica, aunque los más pequeños lo tienen más complicado debido a los elevados costes de las tarifas de procesamiento. Además, hablamos de una opción que no es universal, como el efectivo, por lo que no todo el mundo puede optar a utilizarla.

Los expertos no han encontrado la solución a este problema que cada vez cuenta con más perdedores debido a la digitalización de los pagos, por lo que recomiendan llevar siempre dinero en efectivo en la cartera. Un método sencillo y universalmente aceptado, que no cuenta con costes ocultos ni necesita infraestructura complementaria.