¿Qué sucede cuando los cajeros automáticos detectan billetes falsos?

La falsificación de moneda es un delito extremadamente grave que afecta a la confianza que los ciudadanos tienen en el dinero en efectivo y puede generar un enorme perjuicio a toda la economía.

La falsificación de moneda es un delito extremadamente grave que afecta a la confianza que los ciudadanos tienen en el dinero en efectivo y puede generar un enorme perjuicio a toda la economía.

Entre los agentes económicos más proclives a padecer intentos de fraude con la autenticidad de los pagos en metálico están los establecimientos comerciales de cara al público, especialmente los pequeños comercios y negocios. Para protegerlos contra la falsificación de dinero, Prosegur Cash ofrece servicios como Cash Today, que emplea las mejores tecnologías para detectar billetes falsos y rechazar los pagos realizados con ellos.

 

Una correcta gestión del efectivo disminuye los riesgos

Los falsificadores intentan infiltrar sus monedas y billetes falsos en la cadena de transacciones económicas realizadas usando efectivo. Para ello suelen recurrir a hacer pasar la moneda falsa como verdadera a la hora de adquirir bienes, ya sea para que estos les salgan gratis o para venderlos más tarde recibiendo dinero real.

Por eso los establecimientos comerciales de compraventa de artículos son las víctimas predilectas de estos delincuentes. Mientras que los cajeros automáticos detectan billetes falsos con facilidad, para los particulares puede ser más difícil diferenciar el billete real del falsificado.

Por este motivo Prosegur Cash ofrece maquinaria capaz de detectar este tipo de dinero falso y rechazar el pago con ella. Este servicio se inscribe en un servicio global de gestión del efectivo que incluye su custodia y su traslado desde y hacia los establecimientos comerciales que lo contraten.




La dificultad de ingresar dinero falso en un cajero automático

Los cajeros automáticos son una pieza esencial de nuestra economía diaria al ser los elementos que proporcionan la mayor parte del dinero en efectivo que los ciudadanos manejan. Para facilitar más la gestión de su dinero a los usuarios de entidades financieras, cada vez hay más cajeros automáticos que permiten el ingreso de billetes en las cuentas de los clientes e incluso en cuentas ajenas.

Esto supone el riesgo de que los falsificadores intenten hacer pasar billetes falsos como verdaderos en el cajero automático y que luego esos billetes sean proporcionados a un ciudadano inocente como si fueran dinero real.

No es fácil falsificar un billete

Debido a la afectación que para toda la economía podría tener la falsificación generalizada de la moneda, las autoridades emisoras de dinero (en nuestro caso el Banco Central Europeo) usan las mejores tecnologías para proteger la autenticidad de las monedas y, sobre todo, de los billetes.

Esto permite a los cajeros automáticos detectar billetes falsos, porque se necesita una gran inversión de tecnología y mucha pericia para imitar el papel moneda actual. Es posible engañar a una persona no experta, pero resulta extremadamente complicado engañar a las mejores tecnologías que hoy en día integran la maquinaria de un cajero automático.

La tecnología al servicio de la autenticidad del dinero

El tacto, el peso, la rugosidad, la resistencia y la tensión del papel del billete permiten su diferenciación en las manos de los usuarios, mientras que la complejidad de los materiales y tintas empleadas en su impresión favorecen su diferenciación por medio de maquinaria como la contenida en el interior de un cajero automático.

Asimismo, no todas las medidas de seguridad impresas en un billete son públicas, ya que se da por hecho que hay algunas secretas solo conocidas por autoridades y Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado.

 

Gestiones cuando se detecta dinero falso en un cajero automático

Como hemos señalado, la gravedad de este delito supone la adopción de determinadas medidas legales que obligan a aquellas personas, empresas y entidades que detecten la falsificación de moneda. Entre estas medidas está la de reportar a las autoridades la detección de moneda falsa.

Por lo tanto, cuando los cajeros automáticos detectan billetes falsos, procederán a bloquearlos, no devolviéndolos a quien haya intentado ingresarlos, pero tampoco contabilizándolos como parte de un ingreso bancario legítimo.

Tratamiento de los billetes falsos

La legislación actual obliga a la entidad financiera del cajero automático a remitir los billetes falsos detectados al Banco de España en un plazo máximo de 15 días laborables. La máxima autoridad bancaria española, en colaboración con las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado, analizará los billetes y realizará las gestiones oportunas de cara a la identificación y captura de los responsables de la falsificación para que sean puestos a disposición judicial.

Como es posible que la persona que esté manejando este dinero no sea el culpable sino la víctima de la infiltración de ese dinero falso, el cajero automático indicará la situación, expidiendo un justificante donde se indica que los billetes falsos detectados serán remitidos al Banco de España.

Peritación de los billetes sospechosos por parte del Banco de España

Recibidos los billetes se realizará un minucioso análisis de los mismos para verificar su autenticidad o falsedad. De confirmarse que son falsos, pasarán a ser prueba evidente del delito que será instruido por la autoridad judicial competente.

En cambio, de resultar verdaderos, se finalizará el expediente y se comunicará el ingreso del dinero como válido en la entidad financiera que remitió los billetes al Banco de España.